La mayoría de la gente:

Cree que es clase trabajadora.
Cree que es inteligente.
Cree que es interesante.
Cree que es de izquierda (o que tiene ideas originales aunque controversiales en pos del bien).
Cree que tiene buen corazón.
Cree que el otro es incompetente.
Cree que practica buen sexo oral.
Cree que su pesar es el peor y sus ausencias las más dolorosas.
Cree que sus amigos son únicos.
Cree que es graciosa.
Cree que escribe bien.
Cree que su carrera es importante.
Cree que sus anécdotas son divertidas.
Cree que tiene buen gusto.
Cree que está craneando un golpe maestro.
Cree que el que piensa distinto debería irse a cagar pero no lo puede decir.
Cree que piensa.
Cree que tiene misterio, que tiene secretos.
Cree que no pierde el tiempo.
Cree que se viste bien y que le encanta Woody Allen.
Cree que sería lindo cogerse a sus amigos o amigas.
Cree que es clara cuando habla.
Cree que es parte de una minoría.
O seré yo, que me levanté cruzado y tengo tiempo de pensar.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Superestructuras (humanas)

Un tipo, un bar

Pensamientos, resignaciones y ombligos